1.2. Presupuesto público
El Estado actúa en un constante proceso de toma de decisiones, en su afán por alcanzar sus fines con el suficiente grado de satisfacción para la sociedad; sujeto tanto al cumplimiento de un marco jurídico que le rige, como también a la disponibilidad de los recursos asignados, los cuales son escasos. Las decisiones de las instituciones públicas sobre su accionar futuro se fundamentan en objetivos y metas, estos son incorporadas en planes a ejecutar a diferentes plazos y que finalmente, como lo hemos visto, se concretan en el plan anual, el cual para que sea viable, necesariamente debe marcar las decisiones de índole financiero relativas a la percepción de ingresos y a los costos que implica su ejecución. Esas decisiones de índole financiero son las que se relacionan con el presupuesto público.
Diversos expertos han tratado el tema del presupuesto público refiriéndolo a un contexto global del Estado y la Hacienda Pública y delimitándolo en forma muy concreta a las provisiones de gastos y estimación de recursos para financiarlos.
Así por ejemplo; José Terry, citado en Atchabahian, A. (1996), indica que el “presupuesto es el cálculo legal de lo que gastará el gobierno en el año siguiente, y de los recursos que podrá tener a su disposición para llevar a cabo esos gastos.”
![]() |
Es importante considerar que...
|
||
|
El enfoque de presupuesto moderno hace énfasis en:
- los propósitos y objetivos que persigue la organización,
- en el cumplimiento de las funciones que las leyes les encomiendan,
- en la programación del trabajo por realizar,
- en la compatibilización entre objetivos y metas,
- en la utilización eficiente de los recursos para alcanzarlos; y,
- en la información adecuada que debe tenerse para medir los resultados.
Por lo cual, se concibe en estrecha relación con la planificación institucional y la del Gobierno.
![]() |
Transcripción literal | ||
|
|||
Fuente: Atchabahian, A. (1996)
|