1.1. El Presupuesto como sistema

El funcionamiento de un sistema involucra la interacción de un conjunto de elementos estrechamente relacionados entre sí, que lo mantienen unido y funcionando de modo estable, con un comportamiento global que persigue algún tipo de objetivo. Aplicando este concepto al presupuesto, observamos que este funciona dentro de la dinámica de un proceso sistémico, dado que desde su elaboración, posterior uso y cierre final, involucra una constante interacción entre personas, actividades, procedimientos, transacciones, información y otros elementos, que permite alcanzar ciertos objetivos y metas, no sólo pretendidos para la mejora de la institución propiamente dicha, sino también para la satisfacción de los usuarios o clientes de los bienes y servicios que ella presta.

En un sistema, algunos elementos funcionan como insumos que son procesados por otros elementos para obtener resultados. De la misma forma, en el presupuesto intervienen insumos (por ejemplo; la información o diagnóstico del interno y entorno institucional), que se procesan bajo ejercicios de valoraciones administrativas, jurídicas, de toma de decisiones y de proyecciones para finalmente obtener productos como los documentos presupuestarios (presupuesto inicial y sus variaciones), así como las ejecuciones físicas (del plan) y financieras (ingresos recibidos y gastos ejecutados).